martes, 8 de julio de 2014

Calar Alto 2014

   Por segunda vez corro esta carrera, la media Maratón Calar Alto - Gérgal, en su cuarta edición. Según la organización es la media maratón a mayor altitud de España, y es que la salida y meta se encuentra a 2160 m sobre el nivel del mar. La corrí hace dos años, en el mismo año en que hice mi última carrera de asfalto, la media de Almería, con un tiempo de 1:30. Fue el año que creo estaba más en forma en cuanto a velocidad se refiere, ya que después me he dedicado más a la montaña y la larga distancia. En aquella ocasión completé esta carrera en 1:59 h, en posición 43 de 400 participantes (Aquí podéis ver la crónica de aquel año, que fue una de mis primeras crónicas en este blog). 
   Sabía que este año era prácticamente imposible mejorarlo ya que estos dos últimos meses he estado bajo de forma sin poder entrenar mucho desde la Transvulcania. Encima el sábado anterior a la carrera me entraron anginas y estuve con fiebre todo el fin de semana. Así que me disponía a correr la carrera cargado de antibióticos, sin apenas entrenar y mucho menos en velocidad, y sabía que esta es una carrera muy rápida a excepción de los dos cortafuegos. Con todos estos antecedentes, estaba convencido de que haría mucho peor tiempo, pero dada la corta distancia, 21 km, no habiendo hecho carreras de esa distancia en dos años, salí dispuesto a arriesgar y darlo todo, sin dejar ni un cartucho en la recámara.
   El día prometía ser bueno, con encuentros con muchos colegas, algunos nuevos y otros bastante menos nuevos, como son Pedro, Diego, Manolo, Álex, Paco, Segundo, Ismael, Juande, Rafa, Juan Antonio, Jose ... espero no dejarme ninguno.
   Cuando nos damos cuenta pasa lo de siempre, el arco de salida ya esta a tope de corredores
esperando la salida y nosotros aún sin pasar por el control. Le meto prisa a Diego y entramos. Vamos haciendo hueco para ponernos en mejor posición hasta que me encuentro a unas 3 o 4 filas de los primeros y decido quedarme ahí. Diego avanza hasta ponerse en primera posición junto a Juande y Rafa, y Pedro se queda más atrás. Nada más comenzar la carrera salgo disparado, y como es en descenso voy muy rápido, tanto que me van estorbando corredores y tengo que ir adelantando fuera del sendero, saltando matorrales. Llevo un ritmo muy fuerte para lo que estoy acostumbrado. En los 3,5 km que dura este descenso voy mucho tiempo por debajo de 4 min/km, llevando en todo este tramo un ritmo medio de 4:09, mucho para lo que suelo llevar yo, pero como he dicho antes voy a por todas. Luego hay una pequeña subida en la que bajo algo el ritmo, aunque no mucho, y para mi sorpresa veo a lo lejos a Diego. Eso me motiva a seguir apretando para alcanzarlo y cuando lo hago y empiezo con el cachondeo habitual entre nosotros, noto que no bromea como es habitual en el, y habla poco, lo cual es mala señal. Seguimos juntos hasta el comienzo del primer cortafuegos, donde Diego tenía la intención de hacerlo entero trotando. Sin embargo dice que se lo va a tomar con calma, otra mala señal. Yo cojo la postura de subida, con las manos en los cuadriceps y empiezo a subir lo fuerte que puedo, andando pero a buen ritmo. Cuando llego al final y me paro en el avituallamiento a beber, miro hacia atrás y Diego me sigue aunque un poco retirado. Decido seguir ya que me he propuesto hacer por una vez una carrera a todo lo que pueda. Se sigue por una pista en ascenso pero con mucha menos pendiente, que permite ir corriendo. Al principio me noto las piernas pesadas debido al esfuerzo, y supongo que también algo a la altitud. Voy a buen ritmo y miro hacia atrás a ver si veo a Diego y ya no lo localizo, pero justo detrás de mí va Segundo, otro colega que conocí en la Carrera del Sulayr. Hablo un poco con el y sigo apretando ya en descenso y me sorprende que Segundo se quede atrás cuando pensaba que me iba a adelantar como ocurrió en el ultra del Sulayr. Sigo solo, adelantado a algún corredor cuando veo a lo lejos a otro conocido, Juande de Roquetas. Lo alcanzo, saludo y sigo adelante dejándolo atrás. Estamos en el km 8,8 y al poco llegamos al único y escaso tramo de sendero que hay en toda la carrera, una pena que la organización no meta más senderos y menos pista ya que sería aún más bonita si cabe. Justo al dejar el sendero y volver a la pista, me dice un chico que voy en posición 64, eso me anima bastante a intentar mejorarlo aún más. Llegamos al avituallamiento y aquí me alcanza Juande, que va fuerte e incluso me deja un poco atrás, pero decido exprimirme un poco más y lo vuelvo a alcanzar. Estaremos cerca del km 11 y ya iremos juntos, a un ritmo muy bueno, según mi reloj fuimos a un ritmo medio de 4:30 durante 7 km y encima íbamos todo el rato hablando, fue gracioso ya que algún corredor hasta se sorprendió de que fuéramos hablando a esos ritmos.
   Al fin llegamos al temido cortafuegos final, cerca del km 18. Aquí quemo mi última munición y lo subo agachado, con las manos en los cuádriceps y lo más rápidamente que puedo. Juande se queda atrás ya que dice que no va bien en las subidas y como veo que voy adelantando a mucha gente, me voy entreteniendo en contar a los que voy adelantado. En total en todo el cortafuegos adelanté a 30, aunque algunos eran de la modalidad senderista, y a mí me adelantaron solo dos, una fue la chica que quedó segunda en modalidad femenina, yo entré justo detrás de ella. Este cortafuegos tiene una longitud lineal de 2,60 km, en los que se asciende 410 m del tirón. Tardé en subirlo justo 30 minutos. La última parte pude subirla corriendo hace dos años, y esta vez también me veía con fuerzas para subir este último tramo trotando pero los gemelos tomaron vida propia y cada vez que intentaba correr se me subían. Es algo frustante el poder ir más rápido y no hacerlo por los temidos calambres. Esto es señal inequívoca de que fui a un ritmo muy alto para el que estoy acostumbrado últimamente.
   Alcanzo el tramo de asfalto que me llevará a meta y aquí si que puedo correr sin notar problemas en los gemelos, así que 600 m más adelante cruzo meta, con gran alegría ya que he tardado 2:02 h, que no llega a 3 min más de tiempo que hace dos años y estando en las condiciones que estaba los días previos a la carrera y los pocos entrenos desde la Transvulcania, es un resultado más que satisfactorio para mí. Al final quedé en posición 54 de 400 y el 19 de mi categoría, tan solo 11 posiciones detrás de mi puesto hace dos años cuando estaba más preparado para carreras tan rápidas. Ahora me queda la asignatura pendiente de volver otro año a mejorar ese tiempo, pero para ello tendré que hacer entrenamiento específico para estas carreras.
   Como dato curioso, he comprobado mis ritmos sin contar los dos cortafuegos, y corrí durante 15,6 km a un ritmo medio de 4:30 min/km, y encima a una altitud media de 1890 m. Teniendo en cuenta que mis entrenos son siempre a ritmos mucho más lentos, esto me anima a hacer sesiones de calidad para aumentar mi velocidad, lo que pasa es que luego a la hora de la verdad nunca las hago, a ver si me animo.
   Por último dar las gracias a Ismael por los ánimos y fotos en el cortafuegos, y a Juan Antonio, colega del club Aqueatacamos, que me animó y dio agua en el cortafuegos. Y también a todos los demás colegas que he mencionado antes por el gran día que pasamos.

   FOTOS:


   DATOS TÉCNICOS:

    
   Enlace a movescount: http://www.movescount.com/es/moves/move35322229

   PERFIL:

1 comentario :

  1. Buena carrera paisano, esta no estaria mal correrla tampoco,jajaja.
    Me alegro hayas disfrutado y buenos ritmos para un ultra como tu.

    ResponderEliminar

COMENTAR EN FACEBOOK