Sábado 10 de mayo, son las 2:15 am y suena mi despertador después de una corta noche sin apenas dormir, con los nervios a flor de piel. Por fin llegó el gran día. Bajo a recepción a encontrarme con Laura y sus dos amigos italianos. Nos dirigimos a la estación de las guaguas. Allí ya están casi todas llenas, se nota que hay ganas de empezar! Por cierto, que podrían salir una hora más tarde ya que coger el bus a las 3 para llegar al faro a las 4 y estar dos horas esperando la salida me parece excesivo, aunque la verdad es que pasaron volando.
A la hora justa de salida llegan los colegas de aventuras, Iván, Rafa y Elías. Subimos a la guagua (autobús) y tras un recorrido lleno de curvas y desnivel, llegamos al faro de Fuencaliente poco después de las 4. Hace un fuerte viento y frío, de esto nunca me habían hablado en las innumerables crónicas que he leído durante este último año, en todas se quejan del calor pero nadie del frío y viento, y por lo que me contaron esto también es habitual en esta zona de la isla. Intentamos encontrar un hueco al cobijo del viento, sin demasiado éxito ya que a estas horas ya está el faro lleno de gente. Yo me como el picnic que el hotel me ha preparado y algo reacios nos despojamos de nuestros abrigos y entregamos la bolsa en consigna. Helados de frío nos dirigimos al arco de salida, yo algo más protegido ya que llevo cortavientos, pero mis colegas de aventura van de corto, llegando incluso a tiritar.
A la hora justa de salida llegan los colegas de aventuras, Iván, Rafa y Elías. Subimos a la guagua (autobús) y tras un recorrido lleno de curvas y desnivel, llegamos al faro de Fuencaliente poco después de las 4. Hace un fuerte viento y frío, de esto nunca me habían hablado en las innumerables crónicas que he leído durante este último año, en todas se quejan del calor pero nadie del frío y viento, y por lo que me contaron esto también es habitual en esta zona de la isla. Intentamos encontrar un hueco al cobijo del viento, sin demasiado éxito ya que a estas horas ya está el faro lleno de gente. Yo me como el picnic que el hotel me ha preparado y algo reacios nos despojamos de nuestros abrigos y entregamos la bolsa en consigna. Helados de frío nos dirigimos al arco de salida, yo algo más protegido ya que llevo cortavientos, pero mis colegas de aventura van de corto, llegando incluso a tiritar.
Ya hay bastantes impacientes colocados y pronto estamos rodeados de más compañeros y todos apiñados, cosa que mitiga el frío y
se agradece el calor humano. Se va acercando la hora de salida, la música a tope, el corazón se me sale y el famoso speaker "Depa" caldeando el ambiente con sus palabras, todo un profesional en esto, que ya me animó en la salida y meta de la xtreme Lagos de Covadonga de 2012. Estamos eufóricos y no es para menos, vamos a correr una de las carreras de montaña más importantes del mundo, primera prueba de las Skyrunning series mundial y en la que participan los corredores y corredoras más brillantes del planeta, como Luis Alberto Hernando, Kilian Jornet, Sage Canaday, Tofol Castanyer, Anna Frost, Uxue Fraile, Emma Roca, Emelie Forsberg, Timothy Olson, Dakota Jones, y no olvidar los leoneses Manuel Merillas y Pablo Villa. A este último lo conozco de mi estancia en León. Pensar que estamos en la misma línea de salida de toda la elite mundial emociona, aunque no tengamos ninguna posibilidad de ganar y no lleguemos siquiera a verlos de cerca. Es tal la fama de esta carrera que el 25% de los participantes son extranjeros! la misma proporción que de españoles peninsulares. Depa nos pide que encendamos los frontales, la imagen de miles de cabezas iluminadas es espectacular. Estoy eufórico y emocionado, por fin estoy en el lugar que he estado soñando todo un año, desde que allá por el mes de mayo decidiera apuntarme a esta carrera junto con los colegas, una verdadera pena que al final uno no pudiera venir, Iván Losa te eché de menos, seguro que contigo allí habría disfrutado aún más si cabe. Comienza la cuenta atrás, la euforia es máxima, suena el Thunderstruck de AC/DC y estalla la adrenalina. Estoy en medio de una de las salidas de carrera más espectaculares del mundo, la habré visto decenas de veces en estos últimos 12 meses. En la línea de salida de esta ultramaratón somos 2172 locos, todo un récord superando en casi 500 al año pasado. Al grito de vamooooos! De Depa que retumba entre el Faro y los volcanes, comienza la "Plátano de Canarias Transvulcania Salomon Nature Trails", menudo nombrecito.
se agradece el calor humano. Se va acercando la hora de salida, la música a tope, el corazón se me sale y el famoso speaker "Depa" caldeando el ambiente con sus palabras, todo un profesional en esto, que ya me animó en la salida y meta de la xtreme Lagos de Covadonga de 2012. Estamos eufóricos y no es para menos, vamos a correr una de las carreras de montaña más importantes del mundo, primera prueba de las Skyrunning series mundial y en la que participan los corredores y corredoras más brillantes del planeta, como Luis Alberto Hernando, Kilian Jornet, Sage Canaday, Tofol Castanyer, Anna Frost, Uxue Fraile, Emma Roca, Emelie Forsberg, Timothy Olson, Dakota Jones, y no olvidar los leoneses Manuel Merillas y Pablo Villa. A este último lo conozco de mi estancia en León. Pensar que estamos en la misma línea de salida de toda la elite mundial emociona, aunque no tengamos ninguna posibilidad de ganar y no lleguemos siquiera a verlos de cerca. Es tal la fama de esta carrera que el 25% de los participantes son extranjeros! la misma proporción que de españoles peninsulares. Depa nos pide que encendamos los frontales, la imagen de miles de cabezas iluminadas es espectacular. Estoy eufórico y emocionado, por fin estoy en el lugar que he estado soñando todo un año, desde que allá por el mes de mayo decidiera apuntarme a esta carrera junto con los colegas, una verdadera pena que al final uno no pudiera venir, Iván Losa te eché de menos, seguro que contigo allí habría disfrutado aún más si cabe. Comienza la cuenta atrás, la euforia es máxima, suena el Thunderstruck de AC/DC y estalla la adrenalina. Estoy en medio de una de las salidas de carrera más espectaculares del mundo, la habré visto decenas de veces en estos últimos 12 meses. En la línea de salida de esta ultramaratón somos 2172 locos, todo un récord superando en casi 500 al año pasado. Al grito de vamooooos! De Depa que retumba entre el Faro y los volcanes, comienza la "Plátano de Canarias Transvulcania Salomon Nature Trails", menudo nombrecito.
Empezamos andando debido a la gran cantidad de corredores y corredoras, porque la proporción de mujeres en esta carrera es muy alta comparada con las carreras que suelo hacer por el sur de la península. Por suerte conseguimos correr pronto y así hacer trotando la vuelta al faro. La cosa dura poco y rápidamente empezamos a ascender y llega el temido embotellamiento, y es que el sendero es desde el principio estrecho, con fuerte pendiente y con grava volcánica muy ligera y suelta que dificulta aún más el avance. La imagen que tenemos ante nuestros ojos es espectacular, por delante de nosotros una serpiente de luces rojas a lo largo de todo el sendero, y por detrás otra de luces blancas. Es algo que nos vuelve a poner la piel de gallina, aunque no será la última, no se puede expresar con palabras los sentimientos vividos, hay que estar allí para entenderlo. No paro de mirar e intentar retener en mi retina este espectáculo ya que no se si volveré a ver una imagen tan alucinante en mi vida. En este último año me he visualizado aquí cientos de veces y ahora se ha hecho realidad!
Elías toma la iniciativa y parece que empieza con ambición, adelantando por fuera del sendero, así que los demás lo seguimos como podemos. Seguimos avanzando saltando piedras, no sin cierto mosqueo de los que van andando por el sendero. Llegamos a una curva en la que para avanzar hacemos escalada por una roca, con piedras sueltas que van cayendo de los que van delante, aunque por suerte sorteamos sin ningún percance, a excepción de que Rafa se queda atrás. Sigo avanzando junto a Elías e Iván, y pronto conseguimos salir del embotellamiento y continuar esta larga ascensión a buen ritmo, quizás demasiado frenético para mi, pero quiero seguir junto a los colegas. Aún no ha salido el sol y tengo que quitarme el cortavientos ya que estoy sudando mucho.
Sin darnos cuenta llegamos a Los Canarios ya amaneciendo, durante cerca de dos km recorremos un pasillo formado por cientos de
palmeros que nos animan y casi nos empujan a seguir subiendo con sus
gritos, imposible subir andando, pero de lo más emocionante de esta
carrera es cuando llegas al centro del pueblo, donde no cabe un alma,
todos gritando y animando, y es que nos tratan como a unos héroes. Estoy
recordándolo ahora y me dan escalofríos.. Qué decir de este pueblo que no se haya dicho ya, me quito el sombrero. Todo un pueblo en la calle desde antes de la salida del sol animando a todos y cada uno de los participantes, la imagen de la calle principal abarrotada de gente chillando fue espectacular, mira que la habré visto veces, pero no se puede comparar con vivirlo allí en vivo.
Seguimos avanzando y empiezo a plantearme hacer la carrera sólo ya que estos dos van muy fuertes, y en una subida donde veo que me sacan algunos metros de ventaja tomo una sabia decisión, dejarlos ir y seguir a mi ritmo. Además no quería pasarme de esfuerzo, sufrir demasiado y no llegar a la meta mas espectacular a la que un corredor puede llegar. Quería disfrutar de cada momento, parar cuando hiciera falta para contemplar estos maravillosos paisajes, grabar vídeos cuando quisiera y sin agobios, así que viendo como se estaban tomando mis compañeros la prueba, casi fue un alivio cuando deje de verlos, y eso que me encanta su compañía.
Voy por el km 9,9 y 1200 m de ascenso acumulado. Sigo y sigo avanzando, en esta larga subida casi sin tregua alguna, pero con imágenes espectaculares con los volcanes iluminados por las primeras luces del alba, cuando me maravillo al girar la cabeza y contemplar en la lejanía al Teide y a su derecha la Gomera. En los vídeos se puede apreciar como no paro de mirar en todas direcciones para no perderme detalle de tan espectaculares vistas. Voy corriendo por estos parajes y pienso en que si me cuentan que voy a estar haciendo esto hace 5 años cuando empecé a correr en salidas de 15 min por llano, habría pensado que estaba loco.
Voy controlando mi reloj Suunto Ambit2 y comprobando como los metros de desnivel suben y suben sin parar y viendo que las cuentas previas hechas en papel se quedaban cortas, ya que pensábamos que en los primeros 18 km había un desnivel positivo de 1800 m, simplemente restando la altitud máxima y mínima, qué ilusos! Cuando al fin consigo llegar al final de la primera gran ascensión, en Las Deseadas (km 16,5), llevamos la friolera de 2060 m+ acumulados!. Lo bueno de esto es que ya nos queda menos de ascensión, lo malo es que las piernas están muy castigadas. Ahora viene un vertiginoso descenso de 3,6 Km hasta el refugio de El Pilar, con un descenso de casi 500 m. En este descenso parece que aún conservo las fuerzas casi intactas y bajo a muy buen ritmo disfrutando por esos senderos de grava volcánica y adelantando a corredores, si dejar de alucinar con los paisajes que hay ante mis ojos. Estamos cerca de los 2000 m de altitud y bajo nuestros pies vemos gran parte de la isla y un mar de nubes cubriendo parte del océano Atlántico. Dar aquí las gracias a Rafa por comprar y traerme las polainas, ya que decidimos llevarlas dos días antes, y me vinieron de fábula, ni una piedra en las zapatillas y mira que en todas las carreras tengo que pararme a sacar piedras, aquí con tanta grava volcánica tendría que haber parado cada media hora, así que todo un acierto.
Llego al Pilar, donde está la meta de la media maratón, que salió media hora después que nosotros. Voy en el puesto 1017. Cruzo la primera de 3 metas que tendré que cruzar en este largo día, aunque en esta no tengo ningunas ganas de quedarme ya que aún estoy hambriento de hacer más km y ver más paisajes espectaculares. Aquí también hay gran cantidad de palmeros animando y tenemos el primer avituallamiento sólido. Es aquí también donde tiene la salida la Maratón, y escucho por megafonía que están a punto de salir. Pasado El Pilar vienen unos km sin mucho desnivel, donde la vegetación cambia bastante, con muchas plantas con flores y su consecuencia, muchas abejas. Dos de ellas me pican (últimamente las atraigo demasiado, menos mal que no soy muy sensible a su picadura), también sufro en este tramo varias picaduras de unos insectos minúsculos negros que se me pegaban en los brazos debido a la crema solar, que me hacen la puñeta un buen rato. Noto como me adelanta mucha gente, y muchas son chicas, y al principio mosqueado pienso que como van tan frescos/as, hasta que caigo en la cuenta que son los de la maratón.
Llego al Reventón, 31,4 km y 1415 m de altitud. Pasado este comenzamos la larga y temida ascensión al Roque de los Muchachos, punto más alto de la prueba situado en el km 50 y a una altitud de 2426 m. Esta tremenda ascensión se hace muy dura debido a los fuertes vientos que soplan por esta parte, además de fríos. Hay momentos en los que pienso en ponerme el cortavientos pero no lo hago porque debe de estar empapado en sudor y además nadie a mi alrededor lo lleva puesto. Lo peor es que empiezo a encontrarme mal, me duele la cabeza y temo caer enfermo ya que soy sensible a enfriarme y además vengo de estar un par de semanas con anginas y con con las defensas bajas, tomando antibióticos que bajan la forma física. Voy todo el rato acordándome de las veces que me han dado miedo con el calor que se pasa en esta prueba,pero yo hasta ahora, con más de 7 horas de carrera, no he pasado aún ni un momento de calor y si varios momentos de frío, y es que siendo de Almería ya intuía yo que para mí no sería tan grave el calor, pero bueno, todavía quedaba mucha carrera por delante, ya me arrepentiré de estas palabras.
En esta larga ascensión pasamos por el Pico de La Nieve (40,3 km y 2232 m), donde hay un avituallamiento líquido en medio del sendero, mala idea colocarlo en este sitio ya que al meter a tanta gente en la carrera, y además ir juntos con los de la maratón, se forma a estas alturas de la carrera un gran embotellamiento que vuelve a hacerme perder el tiempo esperando parado o moviéndonos muy lentos. La organización debería plantearse cambiar la hora de salida de la maratón para no coincidir con los de la Ultra, o meter a menos gente. También empiezo a echar de menos un avituallamiento más consistente, creo que haría falta uno con bocadillos antes de este punto.
Llego al Pico de la Cruz (43,8 km y 2351 m) en 8 h y 45 min. Al fin hay bocadillos. Me como uno y mientras llamo a Eva para darle noticias, le digo que me queda poco para llegar al Roque de los Muchachos ya que se ve cerca, que iluso, nuevo fallo, y eso que me sabía bastante bien el recorrido. Desde aquí hasta el Roque recorremos 7 km por un sendero estrecho no apto para gente con vértigo, ya que discurre pegado a la caldera del Taburiente, con unas vistas espectaculares, pero un descuido y la caída sería de muchos de cientos de metros.. Voy muy cansado y ya se que mis previsiones de llegar a meta en menos de 13 h se esfuman, pero no me importa demasiado, lo que me importa es llegar y hacerlo en buenas condiciones. Este será mi peor momento, donde las fuerzas se agotan y se puede comprobar en que tardé 1 h y 20 min en hacer estos 7 km. Pero es ahora cuando de verdad empieza un ultra, cuando estamos cerca de las 9 horas de carrera y el cuerpo empieza a decirte que no puede más, aquí es donde tiene que salir el carácter y la fortaleza mental, ya que ahora tira más la cabeza que las piernas y esto es algo que también se entrena en las horas y horas de salidas por el monte. Para colmo, al pasar el Pico de La Cruz, el clima cambia radicalmente, se corta bastante el viento y empieza el calor. Estamos acercándonos a las 3 de la tarde y ya empiezo a ver escenas dramáticas de corredores exhaustos, tirados en el suelo al cobijo de la poca sombra que dan los matorrales que hay a estas alturas. También hay muchos con heridas en piernas, brazos y cara debido a caídas. Otra cosa sorprendente es que por encima de nuestras cabezas no para de pasar el helicóptero en sus idas y venidas transportando participantes accidentados, desmayados y con golpes de calor.
Al fin llego al Roque de los Muchachos, voy en posición 969 así que desde el pilar en ganado 48 puestos. Aquí encuentro avituallamiento más completo, con mucha fruta, frutos secos, dulces y pasta, todo protegido por una gran carpa que nos alivia un rato del sol. Aunque la temperatura dentro es alta y está llena de gente. Aquí paro unos 10 minutos, para reponer líquidos y comerme un buen plato de macarrones con atún que ya eran amorfos e insípidos, pero que gracias a mi buena boca, sumada a tener las reservas bajo mínimos, me comí todo el plato. Salgo de la carpa para continuar y ya veo más gente descansando en el suelo y un voluntario que va refrigerando a los que lo piden, echándoles agua por encima. Yo por ahora pienso que no lo necesito y continuo mi camino, aunque viendo los vídeos parece que estaba peor de lo que yo pensaba.
Paso por el punto más alto de la carrera y de toda la isla, con 2426 m. Llevo 50 km y 4000 m de desnivel acumulado positivo. Ahora empieza el temible gran descenso, ya que en apenas 17 km pasamos de 2426 m de altitud a 0 m en la playa del Puerto de Tazacorte. Pero aún nos quedan algunas subidas que hacer al principio de este descenso, cosa que la gente se toma mal ya que esperaban no tener que subir más hasta llegar al puerto, gracias que yo estaba prevenido debido a tanto que he leído sobre esta carrera, así que me tomo estas subidas con tranquilidad. Al fin se terminan los sube baja, y ahora es todo bajada, al principio voy muy cansado y apenas puedo correr, pero poco a poco me voy recuperando (los macarrones están haciendo su efecto) y sorprendiéndome del buen ritmo al que voy bajando, tanto que voy adelantando continuamente a más y más participantes, no sin ciertas dificultades debido a lo estrecho del sendero, el gran desnivel y los dichosos bastones que llevan la mayoría y que me dan algún que otro golpe. Sigo esta alegre bajada hasta que me sorprende ver delante de mi a Laura, puesto que iba detrás de mi, así que debió adelantarme en el avituallamiento del Roque. Va a buen ritmo bajando pero al final la alcanzo y a partir de aquí continuamos los dos juntos, primero bajando a buen ritmo por estos senderos que aunque tienen gran desnivel, el suelo es bueno, hasta que llegamos a la zona de piedras, donde el sendero está cubierto de grandes piedras y con las piernas como las llevamos, tenemos que ir con mucha precaución, no en vano vi muchas caídas en esta zona. Mientras tanto, sigo viendo corredores y corredoras desvanecidos por el camino, todos ellos bien atendidos, y el helicóptero sigue sin cesar de dar viajes.
Llegamos al avituallamiento de El Time (62 km y 1156 m), donde un voluntario me refresca echándome agua por encima, que me sienta de fábula, y es que a estas alturas de la carrera, el calor castiga bastante. Como un par de trozos de sandía deliciosa y relleno de agua con hielo, gran idea la de dar hielo en los avituallamientos, es la primera vez que lo veo y todo un acierto.
Seguimos el descenso atravesando el pueblo, como siempre con muchos palmeros animando a todos, y cuando digo todos es a todos, animan al que va delante de ti, y al de detrás, sin dejarse a nadie, que pueblo más volcado con la carrera! También te ofrecen ayuda sin ser de la organización, te dan agua y en una par de ocasiones me conmovió cuando niños pequeños se me ofrecían para echarme agua por encima, que grandes! Por ofrecer hasta me llegaron a ofrecer cerveza y vino que me costó rechazar.
Por fin llegamos a la famosa bajada en zigzag al Puerto de Tazacorte, que habré visto decenas de veces, toda empedrada y con fuerte desnivel, lo único que la salva es las espectaculares vista de todo el pueblo y su playa, además de verse nuestro destino, Los Llanos de Aridane, donde está nuestra ansiada meta. Pero antes tendremos que pasar por la segunda meta del día, la de la maratón, que se encuentra en este pueblo. Durante la bajada vamos escuchando al speaker como nombra y anima a todos los que cruzan la meta, algunos para quedarse y otros para continuar hasta los Llanos. Van cayendo los metros de altitud rápidamente, pero la bajada se hace eterna, giro a derecha, giro a izquierda ... Al fin logramos llegar al paseo de la playa, todo lleno de gente que nos anima eufóricamente y nos chocan la mano, destacar el papel de los niños, algunos muy pequeños, que al chocarles la mano se les ve cara de satisfacción.
Cruzamos meta, voy en posición 911, así que he ganado 58 puestos más, muy buena señal de que fui regulando bien, además terminé la prueba muy bien muscularmente, sin calambres, ya que otras veces me han dado en carreras incluso de menos de 30 km, así que parece que voy haciendo las cosas bien.
Rellenamos líquido y comemos sandía que es lo único que nos entra al estómago en estos momentos, y continuamos en medio de la multitud de palmeros que nos animan, sobretodo a mi compañera por ser chica.
Ahora toca volver a subir, desde el nivel del mar hasta los 350 m a que se encuentran Los Llanos de Aridane. En las ediciones anteriores esto se hacía por carretera, pero este año han cambiado esta parte haciendo la carrera aún más dura, se ve que les parecía poco su dureza que nos han metido por un barranco con arena y piedras enormes que había que ir saltando.
Cuando al fin logramos terminar con el barranco, viene otro regalito, tenemos que salvar un desnivel bestial en una par de cuestas muy empinadas y empedradas, las cuales ponen a prueba nuevamente nuestras piernas. Vamos un grupo de 4 o 5 subiendo con resignación y casi sin mediar palabra, sólo interrumpiendo el silencio para decir que duro es esto. Pero hasta en esta parte del recorrido, sin población de por medio, sigue habiendo palmeros en todas las esquinas animando y ya felicitándonos por el esfuerzo realizado y por conseguir llegar a meta de día. Terminamos la subida y nos dicen que nos queda kilómetro y medio de carretera llana, ya se de dónde le viene el nombre al pueblo, creo que son los únicos metros llanos de toda la isla. Parece mentira pero al fin enfilamos la recta que nos lleva al arco de entrada en Los LLanos de Aridane. Mucha gente nos aplaude y anima, así que poco a poco aumentamos el ritmo hasta que al fin pisamos la alfombra roja que nos lleva a meta entre una multitud que se destroza por animarnos y por chocarnos las manos como sí fuéramos los primeros en llegar, me faltan manos para poder chocarles a todos. Sin duda la mejor llegada a meta que he tenido en mi vida y dudo que se pueda superar. Es indescriptible los sentimientos que se viven en un momento así, entras en meta como flotando, y se te olvida todo el sufrimiento, ahora todo es euforia y alegría. Mi sueño se ha cumplido, he terminado La Transvulcania!
En meta me esperaba Eva, a la cual agradezco su paciencia y apoyo, muy importante para poder realizar retos como este. Además se tomó la molestia de grabar a los primeros entrando en meta y a mi por supuesto.
Mencionar a los colegas de esta aventura, Rafa Bodi, Ivan Cuevas y Elías Manchon, que sin ellos esto sería mucho más aburrido, y de cuya compañía disfruto tanto o más que recorriendo estos maravillosos parajes. También recordar a Laura que me hizo más llevadera esa bajada, y fue una grata compañía en la estancia en la isla, y a otro nuevo amigo, el italiano Marco, que a pesar de los impedimentos del idioma creo que congeniamos y logramos comunicarnos muy bien. Y como no, agradecer a todos aquellos amigos y familiares que me han animado y felicitado a través de mensajes y redes sociales, es algo que siempre agradezco mucho.
Dicen que es una de las carreras más duras del mundo, no se sí será cierto, lo que si es seguro es que es la carrera más dura que yo he hecho hasta la fecha. Que mayor prueba de su dureza que los 713 participantes, un 33 % de retirados que no cumplieron su sueño de cruzar la meta en Los Llanos de Aridane. También la más bonita y espectacular sin lugar a dudas, he disfrutado como ninguna y esa dureza ha sido mitigada por los maravillosos parajes por los que discurre y sobretodo por los palmeros que con sus ánimos pareciera que te empujaban a seguir adelante, sin olvidar tampoco a los voluntarios entregados como no he visto otros. Me ha sorprendido muchísimo tanta amabilidad que hay en esta isla, toda la fama que tienen se queda corta, y es que los palmeros viven esta prueba como su fiesta, y lo hacen intensamente. Muchas gracias a todos por tanto que nos dais a los que venimos aquí a cumplir nuestro sueño, la mujer con una manguera en su jardín, la que te ofrece plátanos, los niños que corren a tu lado animandote y ofreciéndote agua, las miles de personas que se desviven por animarte y chocarte la mano durante las largas 18 h que tiene de duración máxima la carrera, esos voluntarios siempre amables y dispuestos a ayudarte en todo, esos speakers fabulosos con sus palabras de animo que escuchabas a kilómetros... Todos ellos hacen de la Transvulcania una prueba insuperable, una carrera que todo corremontes debe hacer al menos una vez en la vida. Sin ninguna duda la mejor carrera que he hecho, lo peor es que será difícil superarla.
Para el que lea esto y tenga pensado ir alguna vez le recomiendo que haga el mayor esfuerzo posible por ir al menos 2 o 3 días antes, ya que Transvulcania no es solo la carrera, la experiencia Transvulcania comienza desde el primer momento en el que pones un pie en la Isla, el ambiente es espectacular, todo la isla volcada con Transvulcania.
En el aeropuerto de La Palma publico un estado en mi Facebook: "hasta pronto Isla Bonita, volveré", espero poder cumplirlo.
DATOS TÉCNICOS
Decir que aunque a mí me salen 2 km menos, a los demás que conozco le salen los 73,3 km que dice la organización, mi suunto debió despistarse en la bajada a Tazacorte, porque hasta el Time fue coincidiendo con los puntos kilométricos. Destacable en tiempo en poquísimo tiempo en que se corrió en llano.
Rellenamos líquido y comemos sandía que es lo único que nos entra al estómago en estos momentos, y continuamos en medio de la multitud de palmeros que nos animan, sobretodo a mi compañera por ser chica.
Ahora toca volver a subir, desde el nivel del mar hasta los 350 m a que se encuentran Los Llanos de Aridane. En las ediciones anteriores esto se hacía por carretera, pero este año han cambiado esta parte haciendo la carrera aún más dura, se ve que les parecía poco su dureza que nos han metido por un barranco con arena y piedras enormes que había que ir saltando.
Cuando al fin logramos terminar con el barranco, viene otro regalito, tenemos que salvar un desnivel bestial en una par de cuestas muy empinadas y empedradas, las cuales ponen a prueba nuevamente nuestras piernas. Vamos un grupo de 4 o 5 subiendo con resignación y casi sin mediar palabra, sólo interrumpiendo el silencio para decir que duro es esto. Pero hasta en esta parte del recorrido, sin población de por medio, sigue habiendo palmeros en todas las esquinas animando y ya felicitándonos por el esfuerzo realizado y por conseguir llegar a meta de día. Terminamos la subida y nos dicen que nos queda kilómetro y medio de carretera llana, ya se de dónde le viene el nombre al pueblo, creo que son los únicos metros llanos de toda la isla. Parece mentira pero al fin enfilamos la recta que nos lleva al arco de entrada en Los LLanos de Aridane. Mucha gente nos aplaude y anima, así que poco a poco aumentamos el ritmo hasta que al fin pisamos la alfombra roja que nos lleva a meta entre una multitud que se destroza por animarnos y por chocarnos las manos como sí fuéramos los primeros en llegar, me faltan manos para poder chocarles a todos. Sin duda la mejor llegada a meta que he tenido en mi vida y dudo que se pueda superar. Es indescriptible los sentimientos que se viven en un momento así, entras en meta como flotando, y se te olvida todo el sufrimiento, ahora todo es euforia y alegría. Mi sueño se ha cumplido, he terminado La Transvulcania!
En meta con Laura que parece que ha estado de paseo por su cara tan alegre.
En meta me esperaba Eva, a la cual agradezco su paciencia y apoyo, muy importante para poder realizar retos como este. Además se tomó la molestia de grabar a los primeros entrando en meta y a mi por supuesto.
Mencionar a los colegas de esta aventura, Rafa Bodi, Ivan Cuevas y Elías Manchon, que sin ellos esto sería mucho más aburrido, y de cuya compañía disfruto tanto o más que recorriendo estos maravillosos parajes. También recordar a Laura que me hizo más llevadera esa bajada, y fue una grata compañía en la estancia en la isla, y a otro nuevo amigo, el italiano Marco, que a pesar de los impedimentos del idioma creo que congeniamos y logramos comunicarnos muy bien. Y como no, agradecer a todos aquellos amigos y familiares que me han animado y felicitado a través de mensajes y redes sociales, es algo que siempre agradezco mucho.
Dicen que es una de las carreras más duras del mundo, no se sí será cierto, lo que si es seguro es que es la carrera más dura que yo he hecho hasta la fecha. Que mayor prueba de su dureza que los 713 participantes, un 33 % de retirados que no cumplieron su sueño de cruzar la meta en Los Llanos de Aridane. También la más bonita y espectacular sin lugar a dudas, he disfrutado como ninguna y esa dureza ha sido mitigada por los maravillosos parajes por los que discurre y sobretodo por los palmeros que con sus ánimos pareciera que te empujaban a seguir adelante, sin olvidar tampoco a los voluntarios entregados como no he visto otros. Me ha sorprendido muchísimo tanta amabilidad que hay en esta isla, toda la fama que tienen se queda corta, y es que los palmeros viven esta prueba como su fiesta, y lo hacen intensamente. Muchas gracias a todos por tanto que nos dais a los que venimos aquí a cumplir nuestro sueño, la mujer con una manguera en su jardín, la que te ofrece plátanos, los niños que corren a tu lado animandote y ofreciéndote agua, las miles de personas que se desviven por animarte y chocarte la mano durante las largas 18 h que tiene de duración máxima la carrera, esos voluntarios siempre amables y dispuestos a ayudarte en todo, esos speakers fabulosos con sus palabras de animo que escuchabas a kilómetros... Todos ellos hacen de la Transvulcania una prueba insuperable, una carrera que todo corremontes debe hacer al menos una vez en la vida. Sin ninguna duda la mejor carrera que he hecho, lo peor es que será difícil superarla.
Para el que lea esto y tenga pensado ir alguna vez le recomiendo que haga el mayor esfuerzo posible por ir al menos 2 o 3 días antes, ya que Transvulcania no es solo la carrera, la experiencia Transvulcania comienza desde el primer momento en el que pones un pie en la Isla, el ambiente es espectacular, todo la isla volcada con Transvulcania.
En el aeropuerto de La Palma publico un estado en mi Facebook: "hasta pronto Isla Bonita, volveré", espero poder cumplirlo.
DATOS TÉCNICOS
Decir que aunque a mí me salen 2 km menos, a los demás que conozco le salen los 73,3 km que dice la organización, mi suunto debió despistarse en la bajada a Tazacorte, porque hasta el Time fue coincidiendo con los puntos kilométricos. Destacable en tiempo en poquísimo tiempo en que se corrió en llano.
Track wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6892558
En esta ocasión voy a publicar dos vídeos, el ya clásico grabado por mí desde dentro de la carrera, y el grabado por Eva de los 10 primeros llegados a meta y de la animación previa, todo un espectáculo.
MI VIDEO
Esta vez no le he puesto música para que se pueda apreciar mejor el ambiente de la salida y cómo los palmeros animan a lo largo de todo el recorrido, perdonad si en alguna ocasión se escuchan mis jadeos.
MI VIDEO
Esta vez no le he puesto música para que se pueda apreciar mejor el ambiente de la salida y cómo los palmeros animan a lo largo de todo el recorrido, perdonad si en alguna ocasión se escuchan mis jadeos.
VÍDEO DE LOS 10 PRIMEROS
Ahora pongo los vídeos de las entradas en meta de los primeros, Luis Alberto Hernando, Kilian Jornet, Sage Canady y demás hasta el décimo, sin dejar de mencionar al gran Pablo Villa, que quedó en un más que decente noveno puesto, se hablará mucho de el en el futuro, seguro. Según Eva su entrada en meta fue de las más emotivas, junto a su colega también leones, Manuel Merillas. También muy emotiva la llegada del ganador, Luis Alberto Hernando, llorando con su familia, incluso el público lloró. Muy graciosos lo momentos previos, con los speakers animando y una prueba de la llegada a meta con los dos hermanos italianos ganadores del KV y de la media haciendo de Kilian y Hernando.
Enhorabuena por la crónica Jose, Los videos son brutales, los pelos como escarpias!!
ResponderEliminarElïas
Pedro García Carrasco: Enhorabuena nuevamente, por lo mucho que disfrutaste, y disfrutarás siempre con el recuerdo de lo que viviste! Un alucine de fotografía en otra espléndida crónica!
ResponderEliminarDiego Lopez: Muy buena crónica enhorabuena por cumpli un sueño
Esther Molina: Que pasada Jose!!!!! BRAVO
Marco Cestra: Un grazie particolare al mio amico Jose G. Cervellera x la disponibilità, e le foto in occasione della TRANSVULCANIA 2014...
Jose Milagros Esteban Galera: Fantástica crónica, q vistas, q fotos y q bien q te lo pasas tío, después de ver esto la transvulcania ya está como uno de mis próximos retos, gracias
Laura Mozo gracias: es preciosa
Vicente Vidal Mira: estaría pinchando me gusta hasta reventar el raton..I.M.P.R.E.S.I.O.N.A.N.T.E .. y eso que llevo viendo lo que Ivan Cuevas ha ido colgado de fotos y comentarios..también el de Elias..
Felicidades campeón ....... Transvulcania en tu corazón y Tú en el de todos los Palmeros.........
ResponderEliminarSoledad Parra Garcia: Felicidades, a por el siguiente reto
ResponderEliminarIvan Cuevas: Como disfrutamos de los lindos paisajes de la isla,inolvidable!!!
Vicky Verdu Grau: Enhorabuena otra vez, por el carrerón que has hecho, y ahora tambien por la crónica, he disfrutado mucho leyendola, y al mismo tiempo me muero de envidia!! jeje de la sana eh? Me alegro mucho de que hayas cumplido este sueño tan chulo, felicidades! Por cierto, los videos tambien una pasada! Ahora a pensar en el siguiente!!!
Ramon Gallego Yelamos: Venga hombre!!! Ya iba siendo hora que nos tenias en ascuas.
Rafa Bodi: Acabo de leer crónica y vídeo, impresionante, he vuelto a revivir las mismas sensaciones que en carrera, enhorabuena Jose, eres un crack.
José González Martínez: ¡Hola sobrino! Si califiqué los 1O1 Kms. de Ronda como épicos y supermarathonianos, cómo he de calificar ahora la "Plátano de Canarias Transvulcania 2.O14 Salomón Nature Trails", pues COLOSAL, TITÁNICA, IMPRESIONANTE....cada vez más cerca del cielo... y más teniendo en cuenta la altitud en algunos tramos del recorrido .
ResponderEliminarSigues poniéndote a prueba y superando retos carrera tras carrera ´conociendo tus posibilidades, administrando fuerzas y energía. Ya lo decía Sócrates: "conócete a tí mismo" y hay que hacerlo tanto en la faceta mental y espiritual como en la física. El "mens sana in corpore sano" de los romanos, esa conjunción que todos ambicionamos pero que cuesta mucho conseguir. FELICIDADES.
Yno digamos tus crónicas, verdaderos reportajes dignos de todo un periodista. FELICIDADES TAMBIÉN.
Pronto serás, si no lo eres ya, un clásico de estas aventuras. EL CORRECAMINOS SE ESTA QUEDANDO EN PAÑALES A TU LADO.
Y no lo olvides: "CONOCETE A TI MISMO", conjunción de RIESGO Y PRUDENCIA, ¡SIEMPRE ALERTA!
UN ABRAZO. BESOS PARA EVA Y TERESA.
Que grande paisano.
ResponderEliminarHoy mi mujer leyo tu cronica y fue ella la que se emociono y me la recomendo encarecidamente jejeje.
Ya tienes otro fan mas.
Yo de mayor quiero ser como tu!!
Eres sencillamente una máquina....
ResponderEliminarmuy buena crónica. Yo me voy este año a por ella 2018. A ver que sale.
ResponderEliminarGracias Quito, espero te fuera bien! *acabo de ver el mensaje 🤦♂️
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