Desafío Lurbel El Calar del Río Mundo 2014, crónica, fotos y vídeo.

    Este fin de semana he disfrutado a lo grande de una gran jornada de trail running y compañerismo, en un paraje espectacular, el parque natural Calares del Río Mundo y
de la Sima. Volvía después de un año en el que participé en su primera edición junto a Pedro. En aquella ocasión vinimos maravillados de la abundancia de vegetación y sobretodo agua. Este año ha sido muy poco lluvioso y allí también se ha notado la escased de agua, estando todo más seco, además el recorrido lo han cambiado haciendo la carrera más larga, mucho más dura y alpina. 

   El fin de semana prometía ya que me iba a encontrar con muchos amigos venidos de diversas partes de la geografía española: Rafa Bodi y Luis de Onil (Alicante); Pedro y Simón desde Guazamara, Cano, Rafa Sánchez y Jose M. desde Pulpí; y por último Niko y Jose Antonio Amat desde El Ejido. A estos últimos solo los ví en la salida, una pena ya que siempre es agradable contar con su compañía.

   Yo me planteaba esta carrera con muchas dudas de como afrontarla ya que 13 días después tengo el gran reto de la primera mitad del año, La Transvulcania. Temía que me diera el conocido efecto dorsal y me esforzara más de la cuenta y no me diera tiempo a recuperarme. Esta decidido a ir con los colegas, pero la duda estaba en que iba a ser difícil ir todos juntos. Esta duda pronto se disipó ya que a los pocos cientos de metros de estar corriendo, nos quedamos juntos los que haríamos gran parte del recorrido, todos los de Pulpí, Guazamara y Rafa Bodi. Íbamos con bastante calma ya que la mayoría no se había enfrentado a un reto tan grande a pie, y a mí me venía de maravilla ir tranquilo para no arriesgar. Así vamos avanzando con tranquilidad y disfrutando hasta que en el km 2,5 más o menos, sufrimos el primer atasco que nos hace estar parados o andando muy despacio unos 6 minutos debido a un pequeño riachuelo, que por lo visto la gente se lo pensaba para pasar. Pasado el atasco volvemos a coger ritmo, pero la alegría dura poco, y es que en el km 5,5 volvemos a coger un atasco, y este fue de los gordos, estuvimos parados y pasando frío 20 minutos debido a un paso en el que había unas cuerdas para que el que tuviera vértigo se agarrara, y por lo visto las cuerdas sirvieron más para entorpecer el paso que para ayudar. Aquí llegué a desesperarme, me parecía inconcebible estar tanto tiempo parado en una carrera y ya el colmo fue cuando al pasar junto al voluntario lo escucho hablar por teléfono y decir que van a dejar que pase la gente por la derecha, un sitio por el que se podía pasar sin necesidad de cuerdas. Para mi parecer tardaron demasiado en tomar esa decisión ya que nos hicieron perder un tiempo muy valioso.

   Pasado este atasco, ya todo fue más fluido, y pudimos ir al ritmo que queríamos, avanzando sin prisa pero sin pausa, llaneando y cogiendo algo de velocidad. Pero esto duró poco ya que en seguida comenzamos la primera gran ascensión, que nos llevaría desde los 1300 m en los que nos encontrábamos en el km 6, hasta los 1591 m en el km 7,79. Esta ascensión al Padroncillo me pareció mucho menos dura que el año pasado y es que el año pasado, aunque no llegamos arriba del todo por problemas meteorológicos, subimos por un cortafuegos muy empinado.

   La bajada desde el padroncillo fue espectacular, ahí dejé que mis piernas se lanzaran y alcanzar así a Rafa Bodi que se había escapado mientras yo me entrenenía con las grabaciones. Primero una bajada por pista y luego por un sendero zigzagueante con tierra húmeda y algo suelta, que me encantó.

   Seguimos los mismos juntos corriendo en grupo y disfrutando de un gran día de montaña, con un clima ideal para correr, salvo por algunas rachas de aire frío en las cumbres. El grupo se mantiene más o menos junto hasta que en el avituallamiento del km 22 en las casas de la Noguera, Rafa Bodi se queda rezagado.

   Continuamos juntos Rafa Sanchez, Pedro, Simón, Cano, Jose Milagros y yo. A estas alturas algunos ya empiezan a notar la fatiga acumulada. Llegamos a Riopar Viejo, km 30, con un ambiente estupendo, lleno de gente animando. Un pueblo precioso de casas de piedra.

   Nos espera una pequeña bajada y algo de llaneo hasta enfrentarnos a la última gran subida. Llevamos unos 1700 m+ y según la organización la carrera tiene cerca de 2800 m+. Yo no me lo creo y les digo a mis compañeros que ya veran, van a ser unos 2500 m+, menudo error!. Empezamos la ascensión en el km 32,30 a 1053 m de altitud. Llevamos 5 horas y 20 minutos de carrera y yo ya tengo claro que las previsiones primeras de 7 h se han esfumado. Al principio la ascensión es suave y nos vamos cruzando con muchos senderistas que les da la risa al vernos, conscientes de lo que nos espera, y nos dicen "suerte". Vamos en fila india y a un ritmo algo lento para mi gusto ya que nos queda mucho aún por recorrer, y en un momento dado Jose M. ,que va el primero, me dice que lo adelante y eso hago. Sin premeditarlo ni nada agacho la cabeza y acelero el ritmo de subida. Empiezo a adelantar a corredores, uno tras otro y cuando me doy cuenta mira para atrás y veo que mis compañeros están muy atrasados. Decido seguir a mi ritmo ya que tengo ganas de quitarme esta subida cuanto antes sabiendo que después es todo bajada, y pienso en que cuando llegue al final de la subida los esperaré para continuar con ellos. Sigo adelantando a gran número de corredores, no los conté pero debí adelantar a más de 20 en este tramo.

 

   Al fin llego a la primera de las tres cumbres que tiene esta subida. Esta se llama la Almenarilla (1681 m). Estamos en el km 35,6. Aquí me paro a comtemplar las maravillosas vistas y vocear por si me escuchan mis compañeros al fondo. Veo con sorpresa que Rafa Sanchez está cerca así que lo espero, y me dice que los demás van demasiado despacio así que seguimos los dos juntos. Admiramos el paisaje y vemos no sin cierto temor, la cumbre que deberemos alcanzar más adelante, La Almenara se impone magestuosa dominando el lugar. Pero antes deberemos subir a la segunda cumbre que nos tenía reservada la organización, El portillo de los Perros. Esta cumbre no me parece nada dura alcanzarla y seguimos Rafa y yo a por la última. En nuestro afán nos perdemos un poco y tenemos que ir campo a través para volver a conectar con el recorrido correcto. Nos disponemos a realizar la última subida hasta la Almenara con tranquilidad pero a buen ritmo y sin darnos cuenta la alcanzamos en lo que extrañamente me queda la sensación de que fue casi sin esfuerzo, como se puede apreciar en mi cara de disfrute en los vídeos.

 

  

   Por fín estamos en la cumbre de la prueba, a 1796 m de altitud y en el km 37,7. Disfrutramos de unas vistas espectaculares y seguidamente nos dirigimos al avituallamiento después de una pequeña bajada. Aquí pregunto a Rafa que si esperamos a estos o seguimos. Tras deducir que les debe de quedar más de media hora, decidimos seguir bajando a paso tranquilo. A partir de aquí será casi todo bajada, más suave de la que me esperaba, entre bosques y riachuelos preciosos pero que ya no me paré a grabar. Pasamos por el punto kilométrico 44 y ya se confirmaron mis sospechas de que la carrera era más larga de lo que la organización había publicado. Según ellos eran 44,8 km y aún quedaba mucho para Riopar. Aquí tiro el primer tirón de orejas a la organización, que ya les vale equivocarse en 3 km en la distancia total del trail largo. Así que de los 44,8 km. pasamos a casi 48, cosa que a los que van ya justos de fuerzas los remata al no ver el momento de llegar a meta. Son cosas que no entiendo ya que hoy en día es raro el que no tiene gps, y lo comprobé por muchos compañeros y a todos les salía más de 47 km.
   Casi sin darnos cuenta, comentando este gran fallo, llegamos al pueblo, donde las calles estaban con bastante gente animando así que como aún parece que me quedan muchas fuerzas acelero el ritmo para entrar en meta como a mi me gusta, espringtando. Cruzo meta a un ritmo de 4:16, cosa que dice mucho de las energías que aún me quedaban después de más de 8 horas de carrera, 47,5 km y 2750 m+. Rafa Sanchez entra justo detrás mía.

   Poco después llegó a meta Jose M. y Rafa Bodi. Pedro, Cano y Simón tardaron bastante más debido a problemas físicos de alguno de ellos, que espero estén ya recuperados. Decir que ha sido todo un disfrute compartir tantos km y momentos con amigos del pueblo y con Rafa Bodi, espero queden muchos más por venir.
   También quiero dar un segundo tirón de orejas a la organización ya que para una prueba de esta dureza deberían cuidar más los avituallamientos. Empieza a ser demasiado común ver avituallamientos pobres, porque no se puede alimentar a gente que está haciendo tan tremendo esfuerzo solo con fruta, agua e isotónico de pésima calidad. Es algo que me hará plantearme volver otro año.
   Por último comentar que pese a la gran dureza, mucho mayor que la del año pasado, mi impresión no ha sido de que haya sido tanta, supongo que por la preparación que llevo para un reto mayor, y por ir a un ritmo por debajo del mío. El terminar tan bien esta prueba me ha dado mucha confianza para afrontar el gran reto que tengo en apenas 10 días, la Transvulcania en la isla de La Palma, con 73,3 km y 4415 m+. Tendré que tomármela con calma para acabar dignamente. Espero estar en poco tiempo publicando la crónica de mi cuarta ultramaratón acabada con éxito.

   

   DATOS TÉCNICOS:

Track de wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6722321

Clasificaciones: https://www.dropbox.com/s/pfqonale8f7s8sz/clasificaciones.pdf 

Move de Cervellera 8:19 h Carrera de montaña #TrailRunningMove

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